August 31, 2023

Iluminación en el lugar de trabajo

La importancia de una iluminación eficiente en el lugar de trabajo

La iluminación en el lugar de trabajo es tratada, desde el punto de vista de la Prevención de Riesgos Laborales, como un riesgo físico que puede afectar al trabajador en todos los factores que un Técnico Superior en Prevención de Riesgos Laborales quiere controlar.Hoy en día, la iluminación artificial va más allá del simple objetivo de permitir la visión en lugares con escasa iluminación natural. Una buena iluminación tiene una serie de beneficios para el ser humano. Existen varios estudios científicos que relacionan el rendimiento del sistema de iluminación con el rendimiento de un empleado en su puesto de trabajo. Está demostrado que una iluminación artificial adecuada no sólo reduce la posibilidad de error o accidente, sino que también disminuye la fatiga e influye en la motivación de los trabajadores, mejorando el ambiente de trabajo.De hecho, la calidad de la iluminación en los puestos de trabajo puede tener un efecto significativo en la productividad de la organización.También se estima que una buena iluminación reduce la aparición de errores laborales entre un 30% y un 60%, reduce la fatiga visual, los dolores de cabeza, las náuseas y el dolor de cuello que suelen acompañar a la fatiga visual.

El nivel y la calidad de la iluminación necesaria dependen de varios factores

Esto incluye la naturaleza de la tarea, la agudeza visual de cada trabajador y el entorno en el que se desarrolla la actividad. Por ejemplo, mientras que tareas detalladas como la inspección, el montaje de piezas pequeñas, el dibujo técnico, gran parte de las actividades médicas, entre otras, requieren una gran cantidad de energía luminosa, otras tareas que requieren menos detalle, como la carga o descarga de materiales comunes, la manipulación o el embalaje de materiales, requieren niveles más bajos de energía luminosa. Cabe señalar también que, en algunos casos, la mejora de la calidad de las condiciones de iluminación en los puestos de trabajo puede lograrse sin necesidad de aumentar el número de luminarias, sino únicamente mediante un uso más eficaz de la luz natural, un reposicionamiento relativo entre los puntos de luz y los puestos de trabajo, un mejor aprovechamiento de la luz reflejada por las superficies del entorno, entre otros medios. Las principales consecuencias de una iluminación incorrecta o inadecuada son fatiga ocular, dolores de cabeza, estrés, posturas incorrectas, menor motivación, menor productividad y mayor probabilidad de accidentes.

Siempre que observes una iluminación inadecuada, debes:

  • Alerta ante la situación, si hay poca o demasiada luz
  • Informar de la necesidad de sustituir bombillas o de la detección de cualquier daño en el sistema de alumbrado.
  • Tome descansos regulares, especialmente cuando trabaje con equipos de visualización/monitor/pantalla, en los que se requiere un mayor esfuerzo de visión.
  • Evitar situaciones en las que los planes de trabajo se reflejen y entrecrucen
  • Evita los colores taciturnos y melancólicos

Comprueba la eficiencia de la iluminación en tu lugar de trabajo, teniendo en cuenta los siguientes puntos:

  • ¿La luz es suficiente y adecuada? El exceso de luz es un problema habitual en empresas y oficinas. Sin embargo, demasiada luz no significa luz adecuada. Al contrario, puede estorbar y crear una sensación de incomodidad.
  • Límites mínimos y máximos de iluminancia. La iluminación de la zona de trabajo depende del tipo de sala y de las tareas que se vayan a realizar. Por ejemplo, para tareas de oficina con necesidades visuales normales, los límites mínimo/máximo son 500-750(lx).
  • Además de la iluminación general, algunas actividades también requieren una iluminación más específica en el escritorio (desklight).
    El exceso de luz solar debe controlarse con cortinas y persianas. Se tiende a aprovechar la luz natural, complementándola siempre con iluminación artificial, lo que puede provocar un exceso de luminosidad en el lugar de trabajo.
  • Las necesidades de iluminación de las personas varían a lo largo del día. Identificar esta variación puede ayudar al rendimiento laboral.
  • La iluminación con diferentes colores hace que el entorno de trabajo sea menos monótono, provocando una sensación de bienestar.
  • Posibilidad de utilizar elementos luminosos en las paredes para hacerlas más acogedoras.
    Asegúrese de que los ordenadores no estén expuestos directamente a la luz natural. El monitor del ordenador nunca debe estar expuesto a la luz natural de ventanas/puertas. El deslumbramiento perjudica la concentración y la salud.
  • Retirar las lámparas donde haya más luz de la necesaria, asegurándose de que se mantiene una buena iluminación en el lugar de trabajo para no poner en peligro el rendimiento o evitar accidentes (muy importante en zonas donde se utiliza maquinaria).
  • Al limpiar paredes, techos y suelos, el uso de colores claros en el lugar de trabajo mejora la iluminación y los empleados se sienten más cómodos y motivados para trabajar.
  • Los niveles de iluminación en las zonas de descanso y los comedores deben ser más tenues que en las zonas de trabajo.

Importancia del color en los factores de confort

El color también desempeña un papel muy importante. El tratamiento cromático de los ambientes implica, en términos prácticos, conocer no sólo cómo “funciona” cada color, sino también las relaciones entre ellos, en la medida en que será necesario tratar varios colores y decidir a qué color dar más o menos predominancia, en un intento de crear un ambiente cromático armonioso.Por regla general, los colores más claros se perciben como de mayor amplitud, los detalles con colores más intensos destacan y se perciben como más grandes, y los detalles con colores más saturados o puros se perciben como más complejos.Los colores tienen efectos psicológicos innegables, aunque existen variaciones significativas entre los individuos. Estos efectos se deben en parte a experiencias previas no conscientes y a factores hereditarios. Las sensaciones subjetivas más características provocadas por los colores están relacionadas con la distancia, la temperatura y la afectividad psicológica, por lo que, dado que el uso del color influye en el confort y en la percepción visual de las cosas, debe favorecerse siempre que sea posible:

  • colores que fomenten la limpieza y el orden (colores claros),
  • colores que mejoran el rendimiento luminoso,
  • colores que evitan el encadenamiento,
  • colores que se adapten al máximo a los gustos de los trabajadores,
  • colores cuya combinación resulte estimulante, para evitar la monotonía,
  • colores para las zonas de descanso que ofrezcan un cambio de ambiente en comparación con los colores utilizados en las zonas de trabajo,

Recomendaciones prácticas:

  • Los colores neutros deben dominar en las zonas donde las personas pasan mucho tiempo, para no causar fatiga y permitir que destaquen los elementos más importantes: máquinas, obstáculos, señales, etc.
  • Las zonas con poca permanencia (como pasillos, salas de reuniones) pueden tratarse con colores más intensos, teniendo en cuenta el efecto que se quiere reforzar: amplitud, intimidad, relajación, etc.
  • Las zonas con muy poca permanencia, como comedores, vestíbulos, pueden tratarse con colores atrevidos, fuertes contrastes que, por un lado, las estimulen, separen y caractericen de otros entornos.